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Algunos buenos consejos para que las comidas estén libres de gérmenes y enfermedades

Aparte de los riesgos comunes de engordarse un poco más por no poder resistir las tentaciones culinarias que se ofrecen durante los banquetes festivos, hay otros riesgos relacionados con la comida que pueden enfermarlos y hacerles sentir muy molestos.  Lo bueno es que estos riesgos relacionados con la comida pueden evitarse más fácilmente que las tentaciones de repetir con un tercer plato de guajolote o tarta.
 
Las aves grandes, por lo común los pavos (guajolotes) tienen más posibilidades de causar enfermedades relacionadas con los alimentos.  Los pasos que se pueden tomar para evitar este resultado comienzan con el proceso de descongelación.  El problema suele empezar cuando se compra el pavo a última hora,  a menos de dos días del banquete y se piensa que la única opción para una descongelación rápida es dejar el pavo en el fregadero o en el mostrador por medio día hasta que se descongela.  Esto es un paso en falso y por desgracia demasiado común que desemboca en una intoxicación alimentaria.  Desafortunadamente, la única manera segura es la descongelación lenta.  Para ello, hay que colocar el pavo congelado en la nevera, dándole 24 horas por cada 5 libras y así evitará que el pavo se convierta en una incubadora de bacterias nocivas.   También, no olvide de colocar el ave en una bandeja para evitar que los jugos ricos en bacterias goteen sobre los alimentos que hay debajo.  Cuando se manipula el ave cruda (o cualquier otro tipo de carne cruda) tiene que saber que las bacterias del ave están ahora también en sus manos y en los utensilios utilizados.  O sea que lávese las manos y los utensilios con agua y jabón antes de tocar otras cosas. También, tenga mucho cuidado en la limpieza de las superficies, las tablas de cortar y los utensilios después del contacto y antes de que toquen cualquier otra cosa más.
  
Siga las instrucciones de preparación como si su salud y bienestar dependieran de ellas.  Hay tiempos específicos de cocción según el peso del ave y las directrices específicas de temperaturas.  (Vea los enlaces de abajo para los detalles).   Siempre use un termómetro de carnes durante la cocción.  El guajolote se podrá comer sin peligro cuando la temperatura interna llegue a los 165º F.  Muchos cocineros y expertos en la seguridad recomiendan que se prepare el relleno por separado.  Pero si quiere cocinarlo todo junto, el pavo con su relleno, asegúrese de que el relleno también alcance la misma temperatura de 165ºF para que no haya peligro al consumirlo.
 
Entre los placeres que siguen los banquetes festivos se encuentran las conversaciones tranquilas o la salida rápida a la sala para ver los partidos de fútbol.  En ambos casos, muchas veces se deja el pavo y las otras guarniciones en la mesa por varias horas.   La sensación de relajación después de una buena comida de vez en cuando nos deja en un estado donde nos olvidamos de todos nuestros conocimientos sobre los gérmenes.   Las sobras de los alimentos que están en la mesa por más de 2 horas, comenzarán la proliferación de bacterias dañinas que pueden causar enfermedades cuando se consumen  en los próximos días.  Hay que aclarar que la palabra enfermedad en este contexto involucra vómitos y diarreas convirtiendo los días que siguen a la comida en una experiencia muy desagradable y extremadamente peligrosa para los ancianos y para los muy pequeños.
 
Noticias recientes han mostrado otro riesgo evitable relacionado con los alimentos. A veces, se sirve carne picada cruda como una especialidad étnica europea en la forma de sándwiches  caníbales o en su forma más gourmet de bistec tártaro.  El riesgo de enfermarse gravemente por su consumo supera cualquier otro beneficio culinario que este plato pueda ofrecer.
 
Los consejos de los siguientes enlaces le ayudarán a mantener alejados estos visitantes bacterianos intrusos para que no arruinen sus días festivos.
 
 

Contactos

  • Jeff Golden, Salud Pública de Madison y el Condado de Dane, (608) 243-0302